En su primer día de clases Bella ve a cinco estudiantes que le llaman la atención por su belleza y su palidez. Se sientan alejados de todo el mundo, tienen apenas relación con el resto de estudiantes. Son los hermanos Cullen; Edward, Emmett, Jasper, Alice y Rosalie. Edward es quien capta rápidamente la atención de Bella. Su atención va en aumento, hasta alcanzar su máximo punto cuando descubre que Edward posee una gran fuerza y velocidad, ya que cuando Bella está a punto de morir aplastada por un coche el la salva y detiene el furgón.
Finalmente, uniendo todos sus indicios: fuerza sobrenatural, rapidez, el hecho de que no se exponían al sol. Bella saca la conclusión de que Edward es un vampiro.
Entre ellos nace un romance muy difícil ya que Edward es un peligro para ella , pero él no quiere apartarse de Bella y ella tampoco se quiere alejar de él, ya que su amor es más fuerte que el deseo de Edward de saciar su sed y morderla para beber su sangre, que para él era mucho más atrayente que cualquier otra cosa en todo el mundo, y así van sobrepasando todos los problemas que se van creando a lo largo de la Saga.
Ellos en la vida real también están muy enamorados y mantienen una relación hermosa, y eso les permite adaptarse mucho mejor en las grabaciones y a actuar bien sus propios papeles.